Entrevista con Christian Patrickson, Fundador de StratCarbon

25 de Septiembre de 2020

Quizás, Christian Patrickson sea uno de los pocos profesionales expertos en cambio climático y proyectos de reducción de emisiones en Chile. Por más de 18 años se ha dedicado a este tema, siendo responsable de grandes proyectos de reducción de emisiones en la industria de la celulosa y la energía, para luego independizarse y crear su propia consultora StratCarbon.

Luego de tres años trabajando y dos en Estados Unidos, donde hizo un MBA en MIT, ingresó a Arauco Bioenergía S.A., filial del Grupo Arauco, en donde comenzó coordinando la operación de plantas de generación de Bioenergía, un área donde no estaban los cargos creados y qué tenía como objetivo vender excedentes de energía eléctrica al Sistema Interconectado Central.

La creación de Arauco Bioenergía marcó el inicio del período en el que el Grupo Arauco empezó a invertir de manera sistemática en la generación de excedentes de energía eléctrica en sus complejos industriales. Esto fue iniciativa de un Gerente de Ingeniería de Arauco, que Christian reconoce que fue muy visionario.

¿Cómo te inicias en el mundo de la generación de energía y eficiencia energética?

Cuando ingresé a Arauco Bioenergía, no tenía idea de lo que era cambio climático ni el Protocolo de Kioto. La empresa operaba sobre plantas industriales que iban a producir excedentes de energía eléctrica a partir de biomasa renovable, lo que abrió la posibilidad de desarrollar estos proyectos como proyectos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero bajo el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL). Así, no sólo se

autoabastecían las plantas de energía eléctrica, se aportaba energía limpia y eficiente a la matriz eléctrica nacional, sino que además se reducían emisiones de gases de efecto invernadero. Me pareció una muy buena idea y decidí meterme de lleno en el tema.

Si no sabías mucho del tema, ¿cómo lograron tener un proyecto exitoso?

Al principio contratamos consultores que recién estaban partiendo en ese tema, pero la experiencia fue muy desilusionante. Vendían algo que no sabían hacer y que, finalmente, lo terminaba haciendo yo. Así que empecé a desarrollar desde cero todo para tener una metodología de línea base para los proyectos de Arauco. De ahí surgió la primera versión de la metodología consolidada empleada por los proyectos que generan electricidad a partir de biomasa renovable bajo el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) a nivel internacional.

Fuimos los primeros en registrar proyectos de reducción de emisiones usando esa metodología a nivel internacional (el 2006). En el 2016 habíamos registrado 7 proyectos de reducción de emisiones de gran escala, emitido 3.6 millones de créditos de carbono bajo el MDL (15% del total nacional y 7% del total mundial bajo el mecanismo en la categoría Biomasa-Energía) y vendido más de MMUS$ 20 a importantes empresas de energía

internacionales.

Estuviste 13 años liderando la estrategia de cambio climático y negocio de reducción de emisión de gases de efecto invernadero del Grupo Arauco. ¿Qué te llevó a independizarte?

En 2017 armé mi empresa consultora StratCarbon (Strategic Climate Change Consulting Limitada) porque visualicé que el cambio climático representa una amenaza real para el planeta y requerirá de gente preparada y con experiencia en cambio climático y proyectos de reducción de emisiones, que contribuya a resolver el problema. En ese entonces, yo tenía casi 15 años de experiencia en la materia, lo que me motivó a formar mi propia empresa y

así ofrecer mis conocimientos y experiencia no sólo a una empresa.

Las emisiones uno suele asociarlas a empresas del rubro minero u otras industrias generadoras de contaminación ¿Con qué tipo de clientes trabajan?

El tema es muy amplio y trabajamos con todas las industrias y/o sectores. Por ejemplo, las viñas. Hay mercados donde venden el vino que les exigen una huella de carbono muy baja, la que debe calcularse y certificarse bajo ciertos estándares.

¿Y cómo lo están haciendo las empresas en Chile respecto de bajar las emisiones y hacerlas más eficientes?

En los últimos años ha habido mucho progreso, tanto a nivel del gobierno como del sector privado, sin embargo, queda mucho por hacer. En transporte y construcción prácticamente no hay proyectos de reducción de emisiones certificados bajo estándares internacionales, siendo que son sectores relativamente intensivos en emisiones de gases de efecto invernadero. Hay muchos sectores en los que uno puede meterse y llevar a cabo proyectos

innovadores.

Hacer las cosas de mejor forma no es algo revolucionario, sino que obedece simplemente a mejor administración y al desarrollo de nuevos y mejores modelos de negocio. Muchos proyectos de reducción de emisiones apuntan a eso: ser más productivos y más eficientes.

¿Qué debiese hacerse para lograr una solución a esta problemática?

Por ahora los esfuerzos de mitigación internacionales no se condicen con el nivel de esfuerzo que la ciencia señala es necesario para solucionar el problema.

Para aumentar la ambición en las metas de reducción de emisiones, se va a necesitar gente que tenga conocimientos sólidos y profundos en el tema para ayudar, principalmente, a las empresas del sector privado para que evolucionen y adopten modelos de negocio bajo en carbono en los próximos años. Los gobiernos también jugarán un rol relevante en la implementación de política pública que facilite y/o posibilite esta transición.

Cabe destacar que el cambio climático va más allá que un tema RSE (Responsabilidad Social Empresarial). Los incendios del año 2017 y la actual sequía en Chile y lo que está ocurriendo en otras partes del mundo claramente ilustran el alcance y la seriedad del problema. A la larga se traducirá en un problema de competitividad, ya que todos modelos de negocio y, en definitiva, las economías, deberán transitar hacia modelos bajos en carbono.

Cada vez existe mayor consenso en que el cambio climático es un problema real y actual. Por lo mismo, requiere de los incentivos adecuados y de profesionales bien capacitados, que respondan adecuadamente a los múltiples desafíos que este problema impondrá a la sociedad en los próximos años.

*Christian Patrickson es Ingeniero Civil Industrial, generación 1988.