Entrevista con Cristian Cabrera,

Co fundador de SoSafeEmpiece escribiendo el nombre de una imagen del sitio o introduzca la URL


17 de Noviembre de 2020


Renunció a un cargo con futuro en la banca para apostar por una idea inspirada luego de un asalto que sufrió su hermana en casa de sus padres. Lo que comenzó como una app de botón de pánico que conectaba con servicios y autoridades de seguridad, hoy es una de las herramientas más conocidas para reportar situaciones de riesgo y ayuda entre comunidades.


Desde los primeros años en Ingeniería, Cristian supo que quizás no sería el ingeniero modelo porque le gustaba de todo un poco y le llamaban la atención las personas que creaban el futuro. Mientras estudiaba, decidió hacer un minor en Diseño que le dio una visión completamente distinta a la que adquirió como Ingeniero.


Tu inquietud siempre fue emprender. ¿Cuándo decidiste comenzar?

Dos años antes de salir de la Universidad, armamos un e-commerce de vestuario y accesorios con un amigo de mi banda. Después de un ensayo nos pusimos a conversar, surgió esta idea e hicimos nuestros primeros encargos a China. Fue una super buena escuela ya que cometimos muchos errores pero también aprendimos mucho. Se nos empezó a acabar la plata, salimos de la carrera, seguí un tiempo con esta pyme y al año decidimos cerrarla.


¿Buscaste otra idea para desarrollar?

Me puse a buscar trabajo en el área financiera, como una manera de profundizar en algo que no vi tan a fondo durante la carrera financiera. Mis amigos se reían porque yo decía que nunca iba a trabajar en corporativo y terminé en la banca. Partí como Trainee en el BCI donde pasé por varias áreas de trabajo hasta que llegué a la mesa de dinero. Terminado el programa me ofrecieron trabajo pero seguía pensando en emprender y pasaban miles de idea por mi cabeza.


¿Cómo surge SoSafe?

Cuando estaba en el banco me acordé de un problema. Asaltaron a mi hermana en la casa de mi papá. Por suerte no pasó nada pero cuando llamaba a Carabineros el 133 no contestaba. Esto no es exclusivo de Chile, pasa en muchos países. Fue así como pensé… “cómo no va a haber una app donde pueda avisar de la emergencia”. Así que empecé a buscar en Google “botón de pánico” y encontré miles de apps, pero ninguna te conectaba con los servicios de seguridad. Terminé renunciando al banco para dedicarme a esto.


Tus colegas del banco fueron escépticos respecto de la idea del botón de pánico. ¿Cómo se transformó en SoSafe?

En el 2013, Carlos Hernández, mi mejor amigo del colegio e Ingeniero Comercial, trabajaba en una empresa de desarrollo de apps móviles y hablé con él. Cuando le conté la idea me ayudó a darle forma. Después me acordé de Pablo Saba, otro amigo de la U que nos recomendó postular a Start Up Chile para conseguir fondos. Quedaban 4 días para que cerraran las postulaciones y la ganamos. Luego Carlos consiguió un contacto que nos llevó a la empresa de seguridad privada Federal en Piedra Roja y así partimos.


¿Qué fue lo más difícil en los primeros tiempos?

Fue muy difícil la venta. Es algo que no te enseñan en ingeniería. Pero nuestros socios que tenían más experiencia fueron muy buenos mentores. Nuestro primer cliente fue la Municipalidad de Vitacura y no lo podíamos creer. Luego logramos tener más clientes municipales.


Pero en el 2016 nos pasó algo terrible. Nuestros clientes más importantes nos dejaron de pagar pero seguían utilizando nuestro producto y nuestros socios decidieron salir del negocio. Tuvimos que sacar a la mitad de la gente.


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¿Cómo lograron repuntar y convertir a SoSafe en lo que es hoy?
Fue casi milagroso. Ignacio Canals, de Lemontech, nos escribió cuando conoció la app y se interesó y decidió entrar en este negocio. Por otra parte, Carlos trajo un nuevo cliente. Así que partimos el 2017 con nuevas ideas que trajo Ignacio.

¿Cuál es el modelo de negocios que tienen actualmente?
Tenemos dos grandes verticales: mundo público y mundo privado. En el público trabajamos con las municipalidades, carabineros y bomberos. Acá hay una anécdota, porque una vez Bomberos tuvo una falla y el 132 no funcionaba. Lo único que no se cayó fue nuestra App. En el mundo privado tenemos mineras y retail, entre otros. Por ejemplo, un supermecado tiene mapeados todos sus locales y cuando alguien reporta algo dentro de la tienda les llega a la central. También tienen reportes de lo que pasa a los alrededores.

A propósito de seguridad. ¿Cómo fue el uso que le dieron a la app durante la crisis social?
Desde el 18O, hubo un cambio de comportamiento y se quintuplicó la actividad. Mucha gente reportaba barricadas, semáforos dañados, pero también se metían para ver lo que pasaba en algún lugar. La gente colaboraba y se empezaron a cuidan unos a otros. Fuimos los únicos que tuvimos en tiempo real dónde estaban los saqueos, accidentes, semáforos cortados, etc. Antes de nosotros no había ninguna app que hiciera esto, que conectara a todos bajo un mismo paraguas. Es una de las cosas que más costó convencer a los demás, ya que desde nuestra visión no tiene sentido que hayan apps distintas para cada lugar. Con una sola puedes ver lo que pasa cerca de ti y también en otras zonas.

¿Cuál es el siguiente paso de SoSafe?
Permanentemente buscamos mejorar el producto, hacer crecer el equipo y buscar entrar a nuevos mercados. Siempre estamos innovando y agregándole nuevas cosas a la App. Tenemos un foco fuerte en la expansión internacional. Nos han escrito mucho desde afuera y son los mismos problemas que pasan acá.

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Hoy somos 30 personas y estamos en 4 países con servicios. Hace poco ganamos el Premio Avonni 2020 en la categoría “Ciudad Nueva Aguas Andinas”

Luego de tu experiencia, que mensaje transmitirías para los que quieren emprender
Felipe del Sol me decía que las ideas no valen nada, hay que implementarlas. Varios se rieron en mi cara cuando contaba que mi emprendimiento era un botón de pánico. Así que diría que simplemente hay que hacerlo, es la única receta. Es una carrera de supervivencia donde hay que arreglar problemas todo el rato hasta tener un producto que funciona. No hay nada más potente en lo formativo, desafiante en lo intelectual y más duro en lo personal. Te cambia la manera de ver la vida.

*Cristian Cabrera es Ingeniero Civil Industrial mención Mecánica, Generación 2004.