“En un buen sentido, las mujeres deben aprovechar el momento que existe hoy en día” – Entrevista con Liliana SchnaidtEmpiece escribiendo el nombre de una imagen del sitio o introduzca la URL


Con su historia de vida profesional, Liliana Schnaidt es una suerte de embajadora para las mujeres que quieren desarrollarse más allá de lo que dicta el tradicional entorno cultural del país. Desde muy joven se arriesgó a salir de Chile para tener otras experiencias y visiones que fueron fundamentales para construir su carrera como Ingeniera.


Liliana reconoce que es una personaa la que le gusta realizar diferentes cosas. Y, por lo mismo, fue la razón para elegir la carrera de ingeniería ya que la vio como una herramienta que servía para desarrollar de todo, atendiendo a su naturaleza inquieta. Y cuando uno conoce su historia de vida profesional sin duda ha sido así.

Mientras cursaba pregrado se fue de intercambio a Alemania donde estuvo un semestre, país al que volvió tras conocer, en ese primer viaje, a quien se convertiría en su marido años después.

Alcanzaste a trabajar un poco en Chile antes de partir a Europa. ¿Cómo te sirvió esa experiencia para instalarte en otro país?
Me titulé con mención en Tecnologías de Información y entré a Lan.com a la Gerencia de Operaciones. Ahí veíamos temas analíticos, operacionales,y de experiencia de clientes. Por otro lado, desde siempre tuveinterés por los temas sustentables, por ello en paralelo hice mi memoria relativa al fenómeno NIMBY (not in my backyard).

Una vez que llegué a Alemania, y hablando apenas alemán, empecé a trabajar en varias cosas distintas a ingeniería, mientras aprendía el idioma. Pasé por un call center y una agencia de turismo hasta que encontré trabajo como Ingeniera después de muchas experiencias e historias.

¿Cómo fue ese primer trabajo?
Ingresé como Project Leader en una empresa que veía automatización de sistemas que eran aplicados,entre otros, al mundo de la energía. Fue un desafío tremendo porque era la única mujer, latina y prácticamente recién estaba empezando en el mundo laboral. Una se adapta y al final terminó siendo una ventaja.


Después de algunos años, optaron porinstalarse en Chile. ¿Qué los llevó a tomar esa decisión?
Alemania no era ni mi país ni el de mi marido; la familia y la cultura (incluido el humor) se extrañan. Finalmente optamos por Chile y aquí busqué entrar al mundo profesional de la energía, en particular energías renovables, pues mis años en Alemania reforzaron mi convicción de cuán relevante y estratégico era el tema a nivel global. Fui directo a “tocar la puerta” de Enel Green Power, donde entré al área de Desarrollo de Negocios, empujando temas asociados a proyectos renovables. Fui desarrollándome, teniendo la oportunidad de llegar a liderar el área como Gerente de Desarrollo de Negocios.

Me encantaba eso de empujar un mercado en Chile, pues hace 10 años el escenario era otro. Sirvió mucho traer experiencia de afuera y también tener una mirada más global. En Europa el mercado creció gracias a incentivos; las personas en Alemania estaban dispuestas a pagar más por electricidad de fuente renovable. En Chile la situación era distinta, sin embargo Chile ha destacado en lograr en pocos años que la energía renovable fuese competitiva versus fuentes convencionales.

Es poco frecuente encontrar mujeres en puestos de liderazgos en una industria como la eléctrica ¿Cómo ha sido tu experiencia?
Hasta hace años, en el 95% de las veces era la única mujer, por lo que inevitablemente te notas. Pero también porque una se relaciona de manera distinta a nivel de comunicación. Probablemente también para mis colegas hombres es un tema distinto, pero como te digo, en mi caso creo que al final las diferencias han jugado más a favor que en contra.

Sin duda los estilos de liderazgo femenino y masculino son distintos pero, a la vez, complementarios. Hay que ir haciéndose los espacios pero sin caer en una “masculinización” ya que el aporte de las mujeres, desde la diferencia, es muy valioso.

Los estudios demuestran que la mayoría de las mujeres dejan de avanzar en sus carreras cuando se convierten en madres. ¿Qué dirías ha sido clave para poder alcanzar puestos de liderazgo sin la necesidad de renunciar a la maternidad?
Ha sido clave tener un rol 50% y 50% en nuestro proyecto de familia. Pero también para mi es importante ser una mamá entretenida y motivada para mostrarle opciones a mis hijas de todas las cosas que tenemos capacidad de hacer las mujeres.



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Hoy eres Gerente de Personas y Organización en Enel ¿cómo se gestó ese cambio?

Fue un tremendo cambio, con una responsabilidad mucho mayor ya que hay más de dos mil personas en la compañía. Era un cargo muy atractivo y me motiva ver la cantidad de temas y desafíos que tenemos como empresa.



A diferencia del área de Desarrollo de Negocios, en esta función la mayoría somos mujeres. Me gusta que puedan ingresar también hombres para dar una mirada que aporte al negocio, llegar a consensos y acuerdos.


Y desde este cargo, ¿cómo ves la inclusión femenina en un rubro mayoritariamente masculino?

Es un desafío, por el que trabajamos con convicción para tener una mayor presencia femenina y no porque es un tema de moda. No buscamos cumplir con cuotas, ni forzar las cosaspues queremos que sea sostenible, considerando que hay roles donde aún cuesta encontrar mujeres, por ejemplo, algunos cargos técnicos en terreno.. 


Para avanzar en los temas de inclusión femenina hay que tener una mirada madura todos como sociedad. Hay que hacer cosas distintas si queremos resultados distintos. Por ejemplo, si en un proceso de selección seguimos pidiendo muchos años de experiencia en ciertos cargos, por un tema lógico e histórico los candidatos hombres van a continuar siempre en ventaja.



Aunque exista una intención de la empresa a contratar más mujeres, ¿están postulando las mujeres a estos cargos?

Lo estamos logrando gradualmente, por ejemplo cargos en terreno como “Site Manager” en proyectos en construcción que tenemos a lo largo del país. Ahora, es curioso: para postular en un proceso de selección, la mujer tiene que sentirse segurísima y ver que calza prácticamente 100% con el perfil.Por su parte los hombres se lanzan aunque cumplan solo con el 50%.


En términos generales las mujeres tenemos menos confianza en nosotras mismas profesionalmente respecto a los hombres. Te diría que yo también caigo en ello, y en el hecho de que no nos vendemos tan bien como podríamos. 


Cuando tocamos el tema salarial, todavía falta. Estamos avanzando pero esto tiene que seguir cambiando y más rápido, tanto en la parte laboral como salarial, para que “deje de ser un tema”.



¿Qué mensaje darías a tus colegas para avanzar en el desarrollo de la carrera profesional, pudiendo compatibilizar la vida laboral con la familiar y personal?

Diría que no hay un único camino, y que casi siempre hay opciones. La flexibilidad es clave. Es fundamental que los proyectos profesionales puedan conjugarse de la mejor manera en el proyecto familia, mostrando a nuestros hijos e hijas que padre y madre comparten roles de la familia, y que se apoyan mutuamente en su realización profesional. Muchas veces somos las mismas mujeres las que nos auto exigimos más de la cuenta.



En un buen sentido, las mujeres deben aprovechar el momento que existe hoy en día. Hay mayor oferta laboral. Como mujer, una aporta mucho al negocio y, además, influencia o da el ejemplo a las hijas para que sean autónomas e independientes. Para los hijos hombres, el cómo vean a su madre influenciará su concepto de familia y el rol de la mujer en ella. Tanto niños como niñas tienen que saber y ojalá ver que hay opciones y darse cuenta del valor que tiene el “poder elegir”. Para el ser humano, tener opciones va en directa proporcionalidad con la felicidad.