Entrevista con Felipe Lechuga, Ingeniero líder del proyecto OxyGen Chile UCEmpiece escribiendo el nombre de una imagen del sitio o introduzca la URL


Sábado 02 de Abril del 2020



La iniciativa de desarrollar equipos de ventilación mecánica de emergencia comenzó como una inquietud personal al notar una carencia de aparatos en el país. Sin embargo, logró atraer el interés de algunos amigos y ex compañeros de generación para trabajar en este proyecto, donde posteriormente también se involucró la Escuela y algunas empresas privadas.


Felipe venía llegando de un viaje a Estados Unidos cuando los casos de Coronavirus en el país estaban comenzando a aumentar. Hasta ese entonces su tiempo lo dedicaba a trabajar como Gerente General en una empresa familiar de maquinaria de construcción y ser profesor part time en ingeniería mecánica.


Fue en ese momento que notó la falta de aparatos de ventilación mecánica en Chile y pensó en cómo podría ayudar, desde su especialidad, a suplir la potencial demanda de éstos.


¿Cómo fue tomando forma esta iniciativa?

Fue una inquietud bastante personal en un principio. Llamé a algunos amigos, a otro profe de la carrera con el que hacemos cursos juntos y empezamos a investigar. Formamos un “dream team” entre mecánicos y eléctricos, donde varios somos de la misma generación (’93), algunos más jóvenes e incluso alumnos ayudantes del Departamento de Ingeniería Mecánica.


Decidimos tomar un enfoque muy industrial y, para no inventar la rueda, encontramos un equipo en España donde liberaron los planos de un ventilador de emergencia que era factible de hacer en Chile. Como el tiempo apremiaba, empezamos a adaptar los elementos que se podían encontrar en nuestro país. Hay que pensar que, a diferencia de Europa, acá hay muy poca manufactura industrial.


¿Cuánto tardaron en desarrollar el primer prototipo?

El primer prototipo lo tuvimos listo en un día. Tenía sus falencias, las que hemos ido perfeccionando con el correr del tiempo. En un fin de semana fabricamos 5 equipos para demostrar la escalabilidad del proyecto.


¿Dónde se instalaron para trabajar?

La Escuela de Ingeniería nos está apoyando con las instalaciones y dándonos facilidades para trabajar. Esto fue necesario cuando vimos que necesitábamos hacer el proyecto más grande. Además de la Escuela, el Rector nos dio todo su apoyo y también hemos conseguido recursos con empresas privadas. Por ejemplo, la Cámara Chilena de la Construcción, encabezada por Patricio Donoso, ex alumno de la escuela, está financiando todo el período de prototipado.


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¿Ya han probado el equipo?

Si. Red Salud UC nos ha orientado desde el principio y nos ha ayudado a hacer pruebas de calibración. También se han hecho pruebas en animales.


¿En qué fase están hoy en día?

Actualmente seguimos haciendo modificaciones y perfeccionando el equipo, incorporando electrónica para que pueda tener alarmas y monitorización de parámetros, mejoras que las están exigiendo acá vs. lo que fue el modelo español.


¿Cuáles han sido las barreras más complicadas de sortear para lograr fabricarlos?

Lo más complicado ha sido la validación de la autoridad sanitaria. Existen muchos vacíos de cómo realizar una validación puesto que no es algo que se acostumbra hacer en Chile. Es un proceso muy nuevo para las autoridades y también para nosotros.


¿Y qué falta para que se apruebe considerando lo anterior?

Una de las cosas que está pendiente es una certificación que haría la Universidad de Valparaíso para validar que el equipo funciona para lo que está pensando. Luego faltaría una prueba en animales con pulmón enfermo por 24 horas. Pasando esas etapas, el equipo tendría algún grado de validación.


El aparato en sí es muy simple, no requiere electrónica, es muy estable y confiable en su funcionamiento y eso lo hace económico, aproximadamente entre 500 y 1000 dólares dependiendo de la cantidad a fabricar.


Una vez que consigan la validación para empezar la producción en serie ¿cuántos equipos podrían llegar a fabricar?

Inicialmente tenemos financiada la instalación de las líneas de producción y los primeros 50 equipos, proceso que tomaría aproximadamente tres semanas. Luego de eso, podríamos llegar a fabricar 200 aparatos semanales.


¿Quiénes están trabajando contigo en OxyGen Chile UC?

Somos 10 personas a quienes me gustaría reconocer por su compromiso con este proyecto. Ellos son: Felipe Cevallos, Patrick Kulenkampff, Ángel Abusleme, Lorenzo Cerda, Roberto Rosenthal, Javier Vera, Allan Guiloff, Johannes Sindt y Rodrigo Echeverría.


*Felipe Lechuga es Ingeniero Civil Industrial mención Mecánica generación 1993.